Experiencia Cuarteto: La Mona Jiménez Museo Bar
Tiene que amar demasiado a la música un artista que con más de 50 años de carrera y 90 discos editados; necesita seguir vigente, curioso y nunca descansar en la comodidad de saberse el máximo referente de su género.
Así es la forma de entender la vida, la música y el arte para Carlos “la Mona” Jiménez, leyenda viva del cuarteto cordobés quien nunca dejó de alimentar su prolífica carrera y reinventarse.
Es que La Mona siempre tomó el camino inesperado, las bifurcaciones, viajando a contramano muchas veces o empecinado a torcer un destino que en más de una oportunidad lo había sentenciado a tener que dejarlo todo.
Tener su propio Museo bar es una de sus últimas aventuras. Una cruzada emotiva que contó con su hijo Carli como aliado y la curaduría de Sofía Nicolossi.
En septiembre de 2022, las puertas del Museo Bar abrieron como un portal mágico que sumerge a los asistentes en una experiencia cultural y gastronómica.
Trajes, botas, videos, fotos y distintos objetos de memorabilia sirven como escenografía colorida para alimentar los sentidos, el alma y los recuerdos. De nuestra panza se encargará la cocina que comanda el reconocido chef Federico Massaccesi.
Con la particularidad de contar con objetos en exhibición rotativos (el plan es renovar la muestra dos o tres veces al año), el lugar se asegura dinámico y contemporáneo, y aunque todo pueda cambiar en cada momento hay un par de sectores que garantizan el asombro y el viaje emocional de los asistentes siempre.
El sector de trajes donde se lucen auténticas joyas de diseño que el “mandamás” usó en vivo (hay que recordar que nunca repitió un traje a lo largo de su carrera) es uno. Otro, la zona donde se aprecian las tapas de todos sus discos y que se presenta como un auténtico y caleidoscópico túnel del tiempo.
Frecuentadores de sus bailes sabrán que uno de los ritos de cada show es el repaso por el nombre de los barrios cordobeses mediante un lenguaje de señas creado por el mismísimo cantante. Quienes visiten el recinto desde algún punto de Argentina pueden, a través de una pantalla táctil, aprender junto a la Mona a realizar la correspondiente seña de su provincia.
El Museo Bar ha sido pensado en cada detalle, y la carta gastronómica no escapa de esta lógica, ya sea por los nombres de los platos y bebidas que remiten a la historia de Jiménez como la oferta que combina platos sofisticados con opciones populares, acaso la representación plena de sus fanáticos.
Un cordero con polenta blanca de Colonia Caroya o un clásico choripán con pan artesanal alternan entre las distintas opciones de comida mientras que el clásico fernet con cola o el “pritiado” tirado (vino con bebida de limón) se alzan como los más elegidos a la hora de las bebidas.
Desde las 8 de la mañana, con opciones de desayunos y hasta la 1 de la madrugada se sirven todas las comidas que suman en su carta opciones de postres y coctelería.
Como bis, la tienda de souvenirs instalada a la salida y el mural en el estacionamiento son las opciones que quedan para llevarse a casa como recuerdo material, o en nuestras retinas, un pedacito de La Mona.
Mapa
La Mona MuseoBar, Avenida Rafael Núñez, Córdoba, Argentina